Nacido en Hospitalet, aunque sevillano de adopción, Pedro Sierra es un referente de la guitarra flamenca por su precisión, hondura y modernidad. Llega al festival para ofrecer un recorrido por palos esenciales de su arte: rondeña, soleá, alegrías... Sonidos que revelan una trayectoria singular, forjada entre el toque solista (cuatro discos lo contemplan), el acompañamiento para el cante y para el baile y la concepción y composición de espectáculos escénicos. En la segunda parte, se une a él Juana Salazar, una gitana de Sevilla conocida como La Tobala, cantaora de voz propia y compás firme, para desgranar un ramillete de estilos que van del tiento a la bambera, de la alegría al tango. Juntos dan forma a un espectáculo de raíz y vuelo, en el que el respeto a la tradición dialoga con la libertad expresiva del flamenco actual.